En la cuarta clase del curso de literatura hispanoamericana barroca leeremos y comentaremos ocho poemas más de sor Juana, en este caso de temática jocoso-satírica y moral-filosófica.
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En esta clase de ⏳ 38 m 30 s ⌛ hemos leído y comentado los siguientes poemas (se da el primer verso de cada uno):
- Hombres necios que acusáis
- Aunque eres, Teresilla, tan muchacha
- El no ser de padre honrado
- Este que ves engaño colorido
- Miró Celia una rosa que en el prado
- Rosa divina que en gentil cultura
- ¡Oh, famosa Lucrecia, gentil dama
- Intenta de Tarquino el artificio
Hombres necios que acusáis
a la mujer sin razón,
sin ver que sois la ocasión
de lo mismo que culpáis:si con ansia sin igual
solicitáis su desdén,
¿por qué queréis que obren bien,
si las incitáis al mal?Combatís su resistencia
y luego, con gravedad,
decís que fue liviandad
lo que hizo la diligencia.Parecer quiere el denuedo
de vuestro parecer loco
al niño que pone el coco
y luego le tiene miedo.Queréis, con presunción necia,
hallar a la que buscáis,
para pretendida, Tais,
y en la posesión, Lucrecia.¿Qué humor puede ser más raro
que el que, falto de consejo,
él mismo empaña el espejo
y siente que no esté claro?Con el favor y el desdén
tenéis condición igual,
quejándoos, si os tratan mal,
burlándoos, si os quieren bien.Opinión, ninguna gana,
pues la que más se recata,
si no os admite, es ingrata,
y, si os admite, es liviana.Siempre tan necios andáis
que, con desigual nivel,
a una culpáis por crüel
y otra por fácil culpáis.Pues ¿cómo ha de estar templada
la que vuestro amor pretende,
si la que es ingrata ofende,
y la que es fácil enfada?Mas, entre el enfado y pena
que vuestro gusto refiere,
bien haya la que no os quiere
y quejaos en hora buena.Dan vuestras amantes penas
a sus libertades alas
y, después de hacerlas malas,
las queréis hallar muy buenas.¿Cuál mayor culpa ha tenido
en una pasión errada:
la que cae de rogada,
o el que ruega de caído?O ¿cuál es más de culpar,
aunque cualquiera mal haga:
la que peca por la paga,
o el que paga por pecar?Pues ¿para qué os espantáis
de la culpa que tenéis?
Queredlas cual las hacéis
o hacedlas cual las buscáis.Dejad de solicitar,
y después, con más razón,
acusaréis la afición
de la que os fuere a rogar.Bien con muchas armas fundo
que lidia vuestra arrogancia,
pues en promesa e instancia
juntáis diablo, carne y mundo.
En la siguiente clase, la última de este curso, leeremos e intentaremos entender El Sueño.
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